Pastel de queso japonés perfecto (Japanese Cotton Cheesecake)

En Japón se ha puesto de moda un pastel de queso que es esponjoso, ligero y suave como el algodón, el Cotton o Soufflé Cheesecake es una deliciosa combinación de pastel de queso y de suflé, el resultado es tan suave y delicado que casi se derrite en la boca.

La receta es bastante sencilla, con ingredientes que se encuentran fácilmente.

Esta receta fue adaptada de Diana's Desserts para mi molde de 18 cm, además seguí los consejos super útiles de I Eat para hacer este pastel a la perfección, así que échenle un vistazo.

Ingredientes:

- 125 g de queso crema 

- 25 g de mantequilla

- 70 g de azúcar blanca

- 50 ml de leche entera (templada)

- 3 huevos (separando las claras)

- 1 cucharita de zumo de limón

- 30 g de harina simple

- 10 g de harina fina de maíz (Maizena)

- Una pizca de sal

Pasos a seguir:

Antes de comenzar, hay que preparar un molde redondo de tarta, forrándolo con papel de hornear, esto es muy importante para que al desmoldar nuestro pastel, este no se rompa. Lo recomendable es usar un molde de una sola pieza (que no sea desmontable), pero si solo tienes como el que tengo yo, puedes meter el molde dentro de otro molde de silicona. Esto es para que al hornear el pastel en baño maría, el agua y el vapor no entre dentro de la tarta. Muchos usan papel de aluminio, pero a mí eso no me funcionó. Mi molde desmontable es de 18 cm de diámetro y 6 cm de alto.

También debemos precalentar el horno a 200ºC y llenar una bandeja con agua caliente. hora sí, podemos empezar.

1. Hervir agua en un cazo. En un bol grande, combinar el queso crema y la mantequilla, poner el bol sobre el cazo de agua hirviendo, apagamos el fuego y mezclamos con una espátula, fundiendo los ingredientes hasta que que la mezcla esté cremosa. Apartamos para dejar enfriar a temperatura ambiente.

2. En otro bol, tamizamos la harina simple y la Maizena. 

3. Añadimos 3 yemas de huevo (a temperatura ambiente) en la mezcla de queso crema, mezclando suavemente con unas varillas. Añadir la leche lentamente, mezclando. La leche debe estar templada.

4. Añadir la mitad del azúcar (más o menos) a la mezcla de queso crema y una pizca de sal, y mezclar bien hasta que no se vea el azúcar. Finalmente volver a tamizar la harina sobre la mezcla, e incorporamos con las varillas, asegurándonos de quitar los grumos.

5. En otro bol bien limpio, batimos las claras de huevo frías con unas varillas eléctricas hasta que quede espumoso, agregamos el zumo de limón, y batimos hasta que se empiecen a montar las claras. En este punto empezamos a agregar poco a poco la otra mitad del azúcar, terminamos de batir a la velocidad más alta hasta que quede a punto de nieve.

6. Con una espátula, agregar un tercio de las claras en la mezcla, usando siempre movimientos suaves para no perder mucho aire. Seguir añadiendo las claras por tercios hasta que la masa quede bien mezclada y suave.

7. Verter la masa en el molde preparado, golpeando ligeramente para sacar las burbujas de aire y poner al baño maría en el horno (asegurándonos que queda suficiente agua en la bandeja). Hornear sin la función de convección (sin ventilador, con calor arriba y abajo). Pon un cronómetro a 18 minutos, estando atentos al pastel.

8. Cuando pasen 18 minutos, o cuando veamos que el pastel está redondo y algo dorado por arriba, bajar la temperatura a 160º C y hornear unos 12 minutos. (En ningún caso se debe abrir el horno, porque el pastel se hundirá)

9. Después de 12 minutos, o cuando se vea que el pastel ha subido bastante, apagamos el horno y dejamos que el pastel se termine de hornear durante 30 minutos (¡sin abrir el horno!). Es muy importante ser pacientes, y dejar que el pastel vaya enfriando lentamente, porque un cambio de temperatura brusco hará que se desinfle (lo normal es que encoja un poquito sin hundirse).

10. Después de 30 minutos podemos abrir el horno solo unos centímetros para dejar salir el aire caliente poco a poco, unos 10 minutos. Se puede dejar así en el horno hasta que esté completamente frío. Desmolda el pastel esponjoso y déjalo reposar en la nevera al menos durante la noche, sabe muchísimo mejor así.

Pastel de queso japonés recién salido del horno

Cuando sale bien, este pastel es de mis favoritos, ¡animo a todos a probar a hacerlo en casa!  

Si no te salió como esperabas, no te preocupes. Yo tuve que hacerlo 4 veces para que me saliera bien (mis dos errores fueron no usar un molde completamente aislante, y no usar la temperatura y tiempo adecuados - no lo dejé suficiente tiempo en el horno así que se desinfló, recuerda que para este pastel es mejor dejarlo más tiempo en el horno que menos). Sigue intentándolo y lee los siguientes consejos para solucionarlo.

Consejos:

* Recuerda siempre vigilar la temperatura. Esto es lo más importante, este pastel no soporta los cambios de temperatura, así que hay que asegurarse que estamos horneando a la temperatura correcta, ¡y nunca se debe abrir el horno hasta el final!

a) Si el pastel queda muy denso o húmedo por abajo, seguramente entró agua o vapor por debajo. este es el error más común, muchos dicen que la solución es cubrir el molde con papel de aluminio, pero esta no es una solución 100% eficaz por la condensación puede colarse por las capas de papel de aluminio. La solución más acertada es usar un molde no desmontable. Y si no se encuentra un molde así, se puede poner el molde desmontable dentro de un molde de silicona que actúe de aislante.

Uno de mis resultados desatrosos. Este pastel denso y desinflado salió mal por usar un molde desmontable cubierto de papel de aluminio y por usar la temperatura y el tiempo inadecuados.

b) Si el pastel de queso sube demasiado rápido y luego se desinfla, necesitarás ajustar la temperatura y el tiempo. No uses el ventilador del horno, aunque sí es importante tener calor tanto por arriba como por abajo. Hay que comenzar con temperatura alta, e ir bajándola poco a poco. Normalmente, el pastel de queso japonés tarda un poquito más de una hora en hornearse, así que es esencial ser muy pacientes.

c) Si la parte de arriba del pastel de queso se rompe, la temperatura es demasiado alta, o se está poniendo demasiada masa en el molde. Dejar unos 2 centímetros para dar suficiente espacio al pastel para subir. 

d) En la mayoría de las recetas se pide una harina de bajo contenido de gluten conocida como "cake flour", si no se tiene esta harina, no pasa nada, la harina simple funciona perfectamente para esta receta. Aunque hay algunas recetas que sugieren sustituir el 'cake flour' por harina simple más 2 cucharadas de harina fina de maíz. Aunque a mí esto no me ha hecho falta, en casa se puede probar.

e) Porbé varios quesos crema para la receta pero definitivamente el que mejor resultado tuvo fue el Philadelphia original, tiene un sabor muy suave que sirve perfectamente para la mayoría de los postres. Si no tienen Philadelphia pueden buscar otro queso para untar que sea bajo en sodio, porque, si no el pastel quedará algo salado. Además hay que evitar quesos bajos en grasa.

Espero que puedan probar este pastel, es muy delicioso y gusta a todo el mundo por lo ligero que es, si han tenido otro problema en la receta dejen un comentario