Ingredientes:
Para el bizcocho:
- 3 huevos (preferentemente a temperatura ambiente)
- 90 gr de azúcar blanca
- 90 gr de harina simple
- 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Para las tres leches:
- 200 ml de leche normal (puede ser entera, semi o desnatada, como se prefiera)
- 200 ml de leche evaporada
- 200 gr de leche condensada (en gramos y no mililitros en este caso)
- Unas gotas de esencia de vainilla (opcional)
Para el topping:
- 200 ml de nata para montar (bien fría)
- 2 cucharadas de azúcar blanca
- Canela en polvo
- Fresas
Pasos a seguir:
0. Precalentar el horno a 175ºC.
1. Batir los huevos a velocidad alta hasta que estén espumosos.
2. Añadir el azúcar poco a poco, batiendo bien, intentando incorporar todo el aire posible.
3. Una vez que la mezcla de huevo está blancuzca, seguir batiendo a velocidad baja unos 2 minutos más. Esto hará que se estabilice la textura del huevo, y quitando las burbujas de aire que sean demasiado grandes.
4. Tamizar la harina, añadiéndola en dos partes y mezclándola con cuidado con unas varillas.
5. Antes de que se termine de mezclar, opcionalmente se puede añadir esencia de vainilla.
6. Verter la masa en un molde de horno, es mejor si es un molde no desmontable (como el de vidrio que usé yo), ya que así se puede echar la mezcla de leche sin tener que cubrir el molde con plástico transparente. Utilizar mantequilla o spray antiadherente para engrasar el molde, si se usa un molde desmontable, utilizar papel de horno.
7. Echar la masa uniformemente por todo el molde, y luego golpear sobre la mesa ligeramente para que romper las burbujas de aire grandes que hayan quedado.
8. Hornear a 175ºC de 12 ta 15 minutos, comprobando que el bizcocho esté hecho con un palillo.
9. Dejar enfriar el bizcocho a temperatura ambiente mientras hacemos la mezcla de leche.
10. Mezclar leche normal, leche evaporada y leche condensada y reservar hasta que el bizcocho esté a temperatura ambiente.
11. Si has hecho el bizcocho en un molde desmoldable, necesitarás desmoldar el bizcocho, luego curbir completamente el molde con plástico film transparente para que la mezcla de leche no se salga. Es por esto que recomiendo utilizar un molde de vidrio como el que usé yo.
12. Pinchar el bizcocho con un tenedor o un cuchillo, haciendo agujeritos por toda la superficie para que la leche pueda absorberse mejor.
13. Verter la mezcla de leche sobre la tarta, centrándonos sobre todo por el centro. La tarta absorberá todo el líquido, pero si no es así al principio, no importa porque al dejarla reposar, se absorberá completamente.
14. Enfriar la tarta en la nevera durante una noche, y aprovechar para dejar en la nevera también la nata para montar.
15. La mañana siguiente, montar la nata para montar, añadiendo el azúcar para endulzarla, y extender uniformemente por la tarta.
16. Como toque final, se puede decorar espolvoreando canela en polvo, que va genial con esta tarta, y con unas rodajas de fresas para añadir un toque frutal y fresco a esta tarta cremosa.
¡Mirad que maravilla de tarta más esponjosa, jugosa y cremosa! Tenéis que probar esta tarta tres leches, sobre todo en verano cuando hace calor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario