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miércoles, 12 de agosto de 2020

Chutney dulce de tomate (receta de mi abuela)

Mi pasión por la cocina definitivamente me viene de mi madre. Todo el mundo dice eso de que su madre es la mejor cocinera del mundo, pero es que puedo decir honestamente que no he probado ninguna comida mejor que la que hace mi madre. Ella aprendió de la experiencia, no se lleva mucho por las medidas, cantidades ni otros tecnicismos, así que a veces parece que la cocina es un talento natural para ella. Pero nada más lejos de la realidad, siempre me cuenta de cuando era joven y los desastres culinarios que causó cuando su madre (mi abuela) le decía que tenía que aprender a cocinar decentemente.

Me identifico mucho con la historia de mi madre. En mi caso, no empezó a gustarme cocinar hasta los veintipico. Mis primeros intentos en cocina y repostería fueron desastrosos, y encima soy la clase de persona que se viene abajo muy fácilmente. Así que no volví a intentar cocinar seriamente hasta que finalmente necesitaba cocinar.

Mi madre fue siempre paciente y comprensiva con mi proceso de aprendizaje, nunca me obligaba a cocinar, que es lo que les suele ocurrir a muchas jóvenes de familia india. Aunque una cosa es cierta, aunque no me gustara cocinar de joven, siempre me quedaba observando a mi madre cuando cocinaba. Es posible que cogiera algunas cosas de ella sólo mirándola, pero no estoy ni cerca de su nivel de cocina. Una de las cosas que siempre me gustó ver cómo hacía, es mi chutney favorito de tomate. Se tarda unas dos horas en hacerlo, pero la espera vale totalmente la pena. El chutney dulce de tomate de mi madre es divino, y por supuesto, ella lo aprendió a hacer de su madre. Finalmente, me he envalentonado a hacerlo yo misma. Sólo se necesitan tres ingredientes, pero hay que armarse de paciencia.



Ingredientes:

- 1 kg de tomates maduros
- 70 gr de azúcar [1/3 taza]
- 1/2 cucharadita de chile rojo en polvo (opcional)

Pasos a seguir:
1. Lavar bien los tomates, escoger tomates que estén bien maduros y jugosos para aprovechar al máximo su dulzura natural.
2. Quitar los ombligos de los tomates y cortar por la mitad.
3. Poner todos los tomates en una olla grande a fuego medio-bajo y tapar. Intentar usar una olla de buena calidad que evite que se quemen los tomates al fondo, ya que no vamos a añadir líquido.
4. Comprobar ocasionalmente que los tomates no se queman ni se pegan al fondo, removiendo con una cuchara. Hay que seguir cocinándolos hasta que suelten una buena cantidad de agua. 
5. Una vez que hayan soltado suficiente agua para cubrir el fondo de la olla, se puede destapar y seguir cocinando. El proceso de cocción dura unas 2 horas.
6. En cierto punto, la piel de los tomates comenzará a soltarse, así que solamente hay que sacarlas de la olla con unas pinzas. No queremos que haya piel de tomate en el chutney.
7. Añadir el azúcar, comprobando la dulzura antes de añadirlo todo. Es posible que se necesite añadir más o menos, dependiendo de la dulzura natural de los tomates. Añadir chile en polvo (opcional) y remover.
7. Una vez que el líquido ha reducido completamente y el chutney tiene un color rojo profundo, está listo. Quitar del fuego y dejar enfriar un poco antes de meterlo en un tarro o bote de cristal.

Se puede disfrutar de este chutney dulce de tomate con panes indios y platos de curry. A mí me encanta con parathas y encurtidos indios, se me hace la boca agua sólo de pensarlo. También se puede usar como mermelada de tomate, untándolo sobre una tostada y disfrutarla durante el desayuno o la merienda.

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